"... Aunque no sepamos nada de su vida, te sienten como a un hermano, como un hijo, como un padre, no sabemos su nombre, no hay que preocuparse... representan a muchos y podemos dirigirnos a cualquiera de ellos cuando queramos, como nosotros son humanos, sienten, se alegran y se entristecen ... sueñan, se confunden y aciertan ... pecan y se levantan, envejecen se enferman y mueren ... Y VIVEN ..."
lunes, 28 de marzo de 2011
Sacerdote, regalo de Dios para el mundo
Etiquetas:
amor,
apostolado,
Iglesia Católica,
Jesucristo,
pureza,
sacerdocio,
sacrificio,
vocación
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario